jueves, 24 de abril de 2025

🐣 *Lucía y la Gran Aventura con el Conejito de Pascua* 🌷


🐣 *Lucía y la Gran Aventura con el Conejito de Pascua* 🌷

Era una mañana soleada y alegre en *Tinajo*, en casa de la abuela. El aire olía a flores, y el cielo parecía pintado de azul pastel. *Lucía*, con sus trencitas saltando de emoción, sostenía entre sus manitas una *cesta preciosa* que su *tía Yaiza* le había hecho con muchísimo amor. Tenía *zanahorias naranjas de fieltro* pegadas por todos lados y un *conejito blanco* bordado en el centro que parecía sonreír.

—¡Es el día de Pascua! —gritó Lucía, dando saltitos por el jardín—. ¡Mi día favorito!

Junto a ella estaban sus primos: *Valentina*, siempre atenta y divertida; *Luca*, corriendo con una sonrisa luminosa; *Vega*, que miraba todo con curiosidad, y el pequeño *Kabir*, que quería seguirlos a todos aunque todavía daba pasitos pequeñitos.

El jardín estaba lleno de sorpresas. Entre los arbustos, detrás de las piedras, debajo de las flores, *huevos de Pascua* de todos los colores brillaban como joyas escondidas. Lucía corría de un lado a otro, llenando su cesta con cuidado.

Pero de pronto… ¡algo mágico sucedió!

Entre las plantas altas, algo blanco y suave asomó la nariz. Lucía se detuvo, parpadeó… y no podía creer lo que veía.

—¿Un conejito… de verdad?

Sí, ¡allí estaba! Un *conejito blanco, con una pajarita azul y una sonrisa traviesa*, la miraba con ojos chispeantes. Era *el Conejito de Pascua* en persona (¡o mejor dicho, en conejito!).

—¡Hola, Lucía! —dijo con una vocecita suave como el algodón—. ¿Quieres vivir una *aventura secreta de Pascua*?

Lucía abrió los ojos como platos y asintió con emoción. Sus primos se acercaron rápidamente, curiosos.

—¡Vamos todos! —dijo el conejito, y con un saltito, los guió hacia una parte del jardín que no habían explorado nunca.

🥚 El Bosque de los Huevos Mágicos

Detrás de la casa, un seto se abrió como por arte de magia, y apareció un sendero brillante lleno de flores parlantes y mariposas de chocolate. Los niños entraron con el conejito al frente.

—Aquí es donde se esconden los *Huevos de los Deseos* —dijo el conejito—. Si encuentran uno, pueden pedir un deseo. Pero cuidado, ¡solo pueden elegir uno!

Lucía y sus primos buscaron entre las flores, las hojas y los arbustos de caramelos. Vega encontró uno dorado, Luca uno con estrellitas, Valentina uno con rayas de arcoíris, y Kabir encontró un huevo que ¡hacía ruiditos como si riera!

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Lucía, después de buscar con calma, encontró uno *rosado con motas brillantes* y una pequeña nota que decía:

> *“Para la niña que ama la Pascua con todo su corazón.”*

Ella cerró los ojos y pidió su deseo.

🎉 El Gran Regalo

En ese instante, el bosque se iluminó con lucecitas de colores y el conejito aplaudió con sus patitas.

—¡Tu deseo se ha cumplido, Lucía! —dijo con alegría—. Has pedido algo hermoso, algo que no se compra ni se guarda: *más momentos felices con tu familia*.

Y así, el conejito les regaló una sorpresa final: una *merienda mágica* con cupcakes de nube, limonada de arcoíris, y una tiendita de campaña donde todos podían contar historias y reírse juntos.

—¡Gracias, conejito! —gritaron todos a la vez.

El conejito les guiñó un ojo, dio una voltereta… y desapareció entre las flores, dejando un rastro de purpurina brillante.

🌟 Un recuerdo para siempre

Esa noche, Lucía abrazó fuerte su cesta de Pascua. No solo había recogido huevos… había vivido una aventura mágica con sus primos y el Conejito de Pascua.

Y mientras cerraba los ojos, sonriendo, pensó:

—Ojalá venga cada año… pero aunque no lo vea, yo ya sé que la magia de la Pascua vive aquí, en mi corazón.

*FIN* 🐰💖

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